Un mundo de color (2ª parte)

 

A la mañana siguiente la madre observaba como su hija aún dormía plácidamente con una clara sonrisa en su cara, por lo que supuso que aún estaba soñando con las historias del mundo de colores.


Poco a poco, la pequeña empezó a entreabrir los ojos y cuando distinguió que la figura borrosa que estaba de pie delante suya era su madre, abrió los ojos de par en par y se incorporó de un salto.


- Mamá, mamá, !Adivina con qué he soñado!, !adivina, adivina!.

- mmm, no sé, dame una pista. Dijo como si no se imaginara la respuesta.

- !Pues, pues! Había muchos colores. Respondió atropelladamente, claramente emocionada.

- ¿Colores?. Preguntó finguiendo sorpresa, mientras sonreía en su interior.

- Siii, y sale cuando está el sol y cae la lluvia al mismo tiempo.

- ¿Lluvia? Siguió finguiendo sorpresa mientras se rascaba la cabeza.

- ¿Qué es la lluvia? Continuó intentando poner una cara de asombro que ocultara la alegría de ver el brillo en los ojos de su hija.

- ¿En serio? Mamá... venga....

- Jajajajaja hija, claro que sé qué es la lluvia y me alegro que hallas tenido un sueño tan bonito. Ha debido de ser ,maravilloso soñar con el arcoiris. Le respondió con alegría pero también con melancolía al recordar todas las veces que ella misma había soñado con el arcoiris y con el mundo de colores.


- Sí, ha sido maravilloso, yo estaba tumbada en la arena mirando al cielo, el sol estaba en lo alto, y la verdad que empezaba a tener mucho calor.

- Bueno, eso no es nada maravilloso, eso es lo que haces cada día. Interrumpió con una sonrisa, esperando la reacción de la pequeña.

- !Espera, que no he acabado¡.

- Continuo ¿Vale?, pero ahora no me interrumpas.


La pequeña empezó a relatar con sumo detalle el sueño que acababa de tener y tal era la emoción con la que lo contaba, que a su madre no le costó ningún esfuerzo trasladarse al fantástico mundo onírico que le describía su pequeña.


- ..... y con la cara mojada por las gotas de lluvia, abrí los ojos y fue cuando vi el arcoiris aparecer en el cielo, fue hermoso, los siete colores flotaban sobre mi cabeza. Soltó un respiro de añoranza, mientras aprovechaba la pausa para recuperar el aire después de la narración casi vertiginosa de su sueño.

- Mama, ha sido precioso. Dijo suspirando.

- Y el próximo sueño estoy segura que será todavía más bonito. Sobre todo cuando te diga por qué se le conocía como el mundo de colores. Le contestó con una leve sonrisa mientras le guiñaba un ojo.

- ¿No era por el arcoiris y por el azul del mar? Preguntó extrañada y a la vez excitada.

- En parte sí, pero todavía no te he hablado de las flores, ni de las mariposas, ni de las aves. Y antes de que digas nada..... te lo contaré esta noche, pero solo si para entonces has terminado todas tus tareas. ¿lo has entendi...?.


Antes de que terminara la frase, la pequeña ya había saltado de la cama y se apresuraba a empezar sus quehaceres.




El día transcurrió como cualquier otro, con la salvedad que la madre hacia tiempo que no veía a su hija hacer las cosas tan deprisa. Un poco antes de la puesta de sol ...


- Mamá, mamá ya he acabado mis tareas, ¿Me sigues contando el cuento?.

- ¿Tan pronto? Si todavía no es hora de acostarse.

- Venga mamá, que ya he terminado todo.

- Bueno, .....¿Por dónde empiezo?, ¿flores, mariposas o aves?.

- ¿Cuál de las tres tenía mas colores? Preguntó rápidamente.

- Las tres podían ser de muuuchos colores.

- Pueeeees, ¿Cuál se podía ver durante más tiempo?.

- En ese caso, las flores, ya que las mariposas y las aves eran animales y por tanto se movían y era más difícil observarlas.

- Entonces si no eran animales, ¿Las flores eran plantas? .

- Eran partes de las plantas .....

- ¿Habían plantas de colores? !Guau¡ Interrumpió con gran emoción.

- ...como decía, las flores eran partes de las plantas, y sí, se podían ver flores de infinidad de colores, formas y tamaños. Las flores proporcionaban una visión mucho más colorida del mundo y de sus paisajes, a los cuales podía cubrir como si fuera un manto multicolor.

Las flores con su belleza y colorido, llegaron inspiraron multitud de canciones y poemas.

- ¿Te has dormido?.

- Nooo, te estoy escuchando, es que me lo estaba imaginando.

- Perdona, es que me parecia raro no escucharte, jajajajaja.




- Venga, sigue contándome cosas de las flores.

- Bueno, pues las flores además de sus colores tenían más características que las hacían todavía mas maravillosas.

- ¿Sí? ¿El qué?.

- La mayoria de las flores desprendía un aroma dulce y embriagador, por lo que no sólo era maravilloso ver su colorido, el pasear cerca de ellas resultaba una verdadera aventura para el olfato.

- !Uau¡ Dormir sobre un lecho de flores debía de ser lo mejor del mundo.

- Supongo.

- ¿Pero sabes una cosa? La función principal de las flores no era colorear a la naturaleza, ni perfumarla.

- ¿No?, ¿Qué puede ser mejor?.

- Pues su función principal era producir semillas para que la planta pudiera reproducise, y su color y su olor sólo eran herramientas para conseguirlo.

- ¿Qué tiene que ver el color y el olor con la reproducción?.

- Las flores gracias a su colorido, a su fragancia y a su aparenencia, atraían a animales, como podian ser mariposas y a algunas aves entre otros.

- ¿Mariposas y aves? Son los animales de colores, ¿Verdad?.

- Sí cariño. Pues todos animales atraídos por las flores ayudaban a la polinización.

- ¿Polizaninación?.

- po-li-ni-za-ción. Las flores producen polen y la polinización es la transferencia de los granos de polen de la parte masculina de una flor a la parte femenina de otra o de la misma flor. El resultado de la transferencia es la fecundación de la planta.

- Y ¿Cómo ayudaban los animales a la polizaninación?.

- Cuando los animales se acercaban a la flor, el polen se adhería en sus patas, antenas, plumas, etc... y como frecuentaban diversas flores, el polen se repartían entre todas.

- Vayaaa.

- Y esto no es todo, las flores podían alimentar a ciertos animales con el polen y el nectar, que era otra sustancia dulce que las flores también producían. Y cuando las flores eran fecundadas, algunas de las flores se convertian en frutos comestibles.

- ¿Frutos ....comestibles? Dijo la pequeña con claros síntomas de estar durmiéndose.

- Sí cariño, ¿Te estás durmiendo? Preguntó suavemente.

- Nooo. Dijo frotándose los ojos.




- Como te decia, algunas flores se convertían en frutos comestibles, frutos también de colores y de deliciosos sabores que alimentaban a más animales...


Giró la cabeza hacia la pequeña, extrañada que no hiciera ningún comentario acerca de los frutos, y pudo ver que ya dormía, nuevamente con una sonrisa en su cara.


- Mañana seguiré con el cuento. Le dijo mientras la arropaba y le daba un beso en la frente.


(continuará...)

(fotos y texto por JJ)

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