BurjaBike, ODS & TU

El 25 de septiembre de 2015, 193 países nos comprometimos con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y su cumplimiento para el año 2030. Los objetivos persiguen la igualdad entre las personas, proteger el planeta y asegurar la prosperidad como parte de una nueva agenda de desarrollo sostenible. Un nuevo contrato social global que no deje a nadie atrás.

La Agenda 2030 representa una forma de actuar en el mundo. Para alcanzar las metas de cada objetivo todo el mundo tiene que hacer su parte: los gobiernos, el sector privado, la sociedad civil y personas como TÚ.

Una ciudad ciclista ayudaría a conseguir varios de los objetivos de desarrollo sostenible, la movilidad sostenible es uno de los ejes principales en la lucha contra el cambio climático.

La mayoría de emisiones de gas de efecto invernadero (GEI) es debido al transporte, usando la bicicleta ayudaría a reducirlo en gran medida. Con el uso de la bici ayudas a reducir las emisiones de CO2.

La bicicleta no genera daños ambientales y cuidad el planeta, no ocasiona contaminación atmosférica, del agua, del suelo y auditiva. Es un medio de transporte accesible económicamente y su mantenimiento es menor que el de un coche. No ocupa tanto espacio en la ciudad. Con la bicicleta puedes ir por lugares que con el coche no tienes permitido y viajar más rápido.

En la lucha contra el Covid-19 ir en bici te permite aparte de ahorrar tiempo y dinero, puedes mantener la distancia social en tus desplazamientos, cuidar tu forma física, evitando enfermedades cardíacas y el riesgo de cáncer. Puedes hacer pausas creativas, promover el comercio local y mejorar tu salud mental. Ir en bicicleta supondría una reducción de costes económicos, sanitarios y sociales para las ciudades. Cada uno de nosotros debemos estar dispuestos a adaptarnos y contribuir al cambio pero también la ciudad tiene que proveer entorno adecuado.

Reduciendo el uso del coche, aumentando las personas que caminan, las que van en bicicleta y usan el transporte público, será una ciudad más saludable, sostenible, más segura, más conectada y más exitosa para todos los que viven, trabajan y la visitan.

Desde 2010 Burjassot ha apostado por la bicicleta como vehículo sostenible de transporte. Desde el servicio municapal de préstamo de bicicletas BurjaBike, el carril bici que recorre varios puntos de la ciudad y se conecta con el de Valencia. También a elaborado un mapa que nos indica el tiempo que se tarda en desplazarnos, tanto en bici como caminando, a diferentes lugares de interés de nuestra ciudad. El ayuntamiento apuesta por la preservación del medio ambiente y la reducción del CO2.

Todos sabemos que en Amsterdan hay cuatro veces más bicicletas que coches, el 60% de los ciudadanos usan la bicicleta diariamente. Pero antes predominaban los coches. ¿por qué no seguir su ejemplo? ¿Cómo se produjo este cambio? Al final de la Segunda Guerra Mundial los Países Bajos empezaron a reconstruir el país y la economía iba en alza, ya que creció su PIB un 222% desde 1948 a 1970, al estar más enriquecidos hubo una masiva compra de coches. Holanda tenía tradición ciclista pero de repente empezó a bajar su uso para darle espacio al tráfico motorizado. En 1971 debido murieron más de 3000 personas de las cuáles 450 eran niños, provocando manifestaciones y un movimiento social llamado “stop kindermoord”, este movimiento exigía mayor seguridad en el uso de la bicicleta para los niños. También se unió la crisis del petróleo en 1973, lo que provocó un cambio de mentalidad. El gobierno holandés mejoró las infraestructuras para la bici e introdujo políticas donde el automóvil pasó a un segundo plano. A día de hoy se sigue invirtiendo en mejoras.

Pensando en Amsterdam que predomina la bici, le pedí a mi primo (nacido en Burjassot) que me diera su opinión, él y su familia usan la bici diariamente en esta ciudad.

“En mi opinión, el uso de la bicicleta es ideal para el uso cotidiano. Es cierto que cuando vine aquí, choca el hecho de que están por todas partes y es muy fácil despistarse y acabar invadiendo el carril bici. A pesar del clima, con una media de 13 días de lluvia al mes, no se hace molesto ya que la lluvia suele ser de baja intensidad y en muchas ocasiones para rápidamente. Amsterdam tiene una población de unos 880.000 habitantes y corre el rumor de que hay más bicicletas que habitantes tiene.
Después de haber vivido en Burjassot y en Barcelona, el uso de la bicicleta te abre los ojos a la cantidad de desplazamientos que se hacen en coche y podrían sustituirse por la bicicleta. Ahora recuerdo con incredulidad la convivencia extrema con los coches en Barcelona. Las calles y avenidas tan grandes para dejar espacio a los coches, el tiempo perdido en atascos, etc. Sin duda, si toda la gente que circula en bicicleta tuviera que hacerlo en coches o incluso, en transporte público, esta ciudad seria muy diferente.

Poder usar la bicicleta para los quehaceres diarios, o incluso para ir a trabajar, se ha convertido en un ideal donde disfrutar del tiempo, a la vez que se hace mas ejercicio y desde luego, se contamina mucho menos.

Obviamente, la ciudad y el país entero han sabido priorizar el uso de la bicicleta en todos los aspectos. Carriles bici, espacios para aparcar las bicicletas, leyes que priorizar a la bicicleta sobre otros medios de transporte en caso de incidentes. Todo esto hace que usar la bicicleta sea muy seguro y sobre todo, que los coches respeten esa prioridad.

Imagino que en climas tan calurosos como Valencia, lo ideal seria poder usar bicicletas eléctricas que ayudan con el pedaleo. Aquí se ven cada vez más.

Benito Roig, 10 años viviendo en Amsterdam”

¿Podemos convertirnos en una ciudad que predomine la bicicleta? ¿Qué deberíamos hacer? ¿llegaremos a conseguir que Burjassot sea una ciudad de movilidad sostenible? Si no lo intentamos entre todos no es posible. Hay que sacar esa herramienta “olvidada” para muchos que nos ha resultado muy divertida desde pequeños, en la cuál nos hemos podido desplazar a cientos de lugares sintiéndonos libres. Tenemos un clima idóneo para hacer de la bici de nuestro medio de transporte todo el año. Yo iba bastante en bici, al trabajo, al instituto ahora suelo ir caminado o en transporte público. Creo que el Ayuntamiento debería tomar medidas para facilitar y fomentar el uso de la bici, ofreciendo más seguridad viaria dando prioridad a los ciclistas, ampliando vías ciclistas y creando aparcamientos seguros. Formar a niños, mayores, ciclistas y peatones para que puedan convivir en armonía. Es el momento de volver a tener BurjaBike integrado con el servicio de bicicletas de Valencia y otras localidades cercanas. Sería un lujo poder tener el Anillo ciclopeatonal Verde Metropolitano de Valencia que nos comunicará nuestra huerta con el mar.

Es hora de sacar la bici y rodar por nuestro pueblo, nuestra huerta, de adecuar los entornos que faciliten las conductas saludables generalizadas para que nuestra ciudad sea más saludable. Y así aportar cada uno su granito de arena para salvar el planeta.

Texto de Ana Sieber